La profesora de la Universidad Eclesiástica San Dámaso (UESD), Dª. Lourdes Grosso García, M.Id, Directora del Secretariado de la Comisión Episcopal para la Vida Consagrada, ha participado los días del 4 al 7 de junio de 2019 en el encuentro anual de los delegados nacionales para las Vocaciones (EVS) del Consejo de Conferencias Episcopales de Europa, que en esta ocasión ha tenido lugar, en Roma, en el Colegio Español.
Han participado 50 delegados de 22 países europeos. La Conferencia Episcopal Española ha estado representada por: Mons. Eusebio Hernández Sola, OAR, Obispo de Tarazona, miembro de la Comisión Episcopal de Seminarios (vocal de la Comisión para la Pastoral Vocacional) y de la Comisión Episcopal para la Vida Consagrada; Mons. Jesús Vidal Chamorro, Obispo Auxiliar de Madrid, miembro de la Comisión Episcopal de Seminarios, D. Sergio Requena Hurtado, Director del Secretariado de la Comisión Episcopal de Seminarios, y nuestra profesora.
El tema marco ha sido: “Iban conversando entre ellos de todo lo que había sucedido” (Lc 24,14). Problemas y perspectivas tras el Sínodo. Han sido tres días de oración, testimonios y reflexiones sobre la vocación al sacerdocio, a la vida consagrada masculina y femenina, al matrimonio a la luz del sínodo de la juventud, el documento final y la exhortación apostólica Christus Vivit.
El momento crucial del congreso ha sido la audiencia con el Papa Francisco quien les recibió en la sala del Consistorio.
Recordando la Exhortación apostólica Christus vivit, en la que alienta a crecer en la santidad y en el compromiso por la propia vocación, el Papa les animó a creer que todo lo que es tocado por Cristo se vuelve joven y se llena de vida. Señaló tres líneas particularmente importantes para él: la santidad, como llamada que da sentido al camino de toda vida; la comunión, como «humus» de las vocaciones en la Iglesia y la vocación misma, conjugándola con las demás: «felicidad», «libertad» y «juntos»; y finalmente declinándola como consagración especial.
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