D. José Antonio Álvarez: «La luz de la fe nos permite entrar en diálogo con la cultura de hoy, no como un rival a vencer sino como el ámbito donde Dios ha querido manifestar sus dones y la plenitud de su vida por medio de su Hijo Jesucristo»
El Obispo Auxiliar de Madrid y Vice-Gran Canciller de la Universidad Eclesiástica San Dámaso, don José Antonio Álvarez, ha presidido esta mañana la celebración de la solemnidad de nuestro patrono, el Papa San Dámaso, con una Misa a las 12:30 horas en la capilla del Seminario Conciliar de Madrid, a la que ha seguido un vino español en la sede de la universidad. La celebración ha contado con la presencia del arzobispo Castrense, don Juan Antonio Aznárez, y el obispo de Siguenza-Guadalajara, don Julián Ruiz Martorell; el rector de la Universidad, don Nicolás Álvarez de las Asturias, rectores de seminarios, autoridades académicas, profesores y docentes y todos aquellos que forman parte de la comunidad educativa.
En su homilía, el Vice-Gran Canciller ha señalado que «desde la reflexión y el estudio estamos llamados a humanizar nuestra sociedad», teniendo la fe como fundamento para profundizar en la labor teológica y en las otras ciencias que en la UESD se imparten «con la certeza de que Dios es el que viene a salvar, a hacer posible la vida de los hombres». Don José Antonio Álvarez ha apuntado que esta luz «nos permite entrar en diálogo con la cultura de hoy, no como un rival a vencer, sino como el ámbito donde Dios ha querido manifestar sus dones y la plenitud de su vida por medio de su Hijo Jesucristo». En este sentido, ha animado a «conocer y estudiar a quienes no piensan exactamente como nosotros, pero también son compañeros en el camino de la vida, con quienes desde la escucha, el diálogo y la reflexión queremos seguir ahondando en el misterio de la realidad, como reza el lema de nuestra universidad: veritatis verbum comunicantes».
El Vice-Gran Canciller, a la luz de la figura de Juan el Bautista, ha concretado algunas actitudes necesarias tanto para el docente como para el alumno en la profundización del misterio de Dios. Entre ellas, ha destacado la necesidad del conocimiento de las Escrituras, que se traducirá en «alimento de la existencia cotidiana y en empeño por darla a conocer y gustar a nuestros contemporáneos». Además, ha señalado que Juan el Bautista «no buscaba adeptos a su persona o a su causa, sino que mostraba al Mesías», lo que para aquellos que desean ahondar en la búsqueda de la verdad les anima a reconocerse necesitados y dejarse interpelar por la presencia de Jesucristo.
Por último, don José Antonio Álvarez ha remarcado que una de las actitudes que forman parte de la identidad de la UESD es la de «abrirse siempre a las indicaciones que recibe del magisterio del Santo Padre y de quien es el pastor de la Iglesia que peregrina en Madrid, en cuyo seno vive y a cuyo servicio está». Agradeció al profesorado su empeño por trabajar en las claves recibidas del Gran Canciller y Arzobispo de Madrid, don José Cobo, el día de la solemne inauguración del curso, que les ha llevado a iniciar «un camino de reflexión interdisciplinar sobre la vocación laical, objeto preferente de atención en nuestra diócesis durante este curso».